- valores culturales: mucha gente, la mayoría, es animista y sigue el vudú, hubo un enfrentamiento de algunos "capitostes" de la psiquiatría y de la psicología en contra de las intervenciones de estos "curanderos magos", concretamente en el terreno de la toxicomanía y otras. AL parecer retiraban la medicación y la sustituían por brebajes. Yo comenté que había dos aspectos a considerar, el psiquiatra debía considerar que le paciente tenía derecho a acudir al sanador que le inspirara más confianza (muchas veces es justo el curandero por razones culturales), y por otra parte, el curandero debía tener la precaución de decirle al "paciente" que hablara con su médico para que le retirara la medicación. Hay posibles problemas de interferencias farmacológicas desconocidas, además de las creencias mágicas. El psiquiatra debía ayudar al paciente a retirar el tratamiento psicofarmacológico, de modo que esta retirada no causara más daño, en lugar de abandonarle a su suerte y desentenderse de él si acudía al vudú. Por tanto el sistema de salud mental (como el resto, ya que esto ocurre con casi todas las patologías) debe ser compatible con la cultura del país. Naturalmente respetando los derechos humanos (declaración de derechos humanos) y los valores éticos. En el documento se hace referencia a los derechos humanos en varias ocasiones.
-en cuanto a la capacidad financiera, es cierto que se deben poner todos los medios disponibles, pero como estos son limitados, hay que tenerlo en cuenta para priorizar unas alternativas sobre otras. No me parece lógico introducir risperidona y paroxetina en el catálogo básico de medicamentos, como han hecho, pero es que querían meter olanzapina, citalopram, topiramato,...ect..., aunque hay ensayos clínicos que muestran ventajas de estos medicamentos, generalmente solo sobre placebo y no frente a alternativas, y hay pocas pruebas de que los psicofármacos realmente beneficien a los pacientes a largo plazo, todo esto considerado en un entono con grandísimas carencias es como para no perderlo de vista. A esto se suma la ausencia de bibliotecas y hemerotecas científicas, por tanto la información provendrá de... los fabricantes, aquí de medicamentos de marca, pero sí de medicamentos genéricos, que tampoco son mancos en las técnicas de ventas. Como se pretende una cooperación mixto, publico privado, hay que atar corto algunas cosas, ya que al final es todo un negocio y a pagar el que tenga y el que no a la calle. Aquí los pacientes se tiene que pagar los medicamentos y llevarlos al hospital, y sí, en ocasiones es un drama. He tenido un problema con un pediatra que quería glucosa al 10%, no hay y es cara, le he dicho que podía hacerla mezclando 450ml de glucosa al 5% y 50ml de glucosa al 50%, teníamos para darle gratis la paciente ambas cosas y la manipulación era sencillísima, bueno pues el imbécil mando a la pobre mujer harapienta a gastar el poco dinero que tuviera en 5 botellas de suero, buenamente se le fue el sueldo base del mes, y no parce que tuviera mucho más. El país como la gente, tampoco parece rebosante de dinero, no tiene petróleo, ni turismo, ni fábricas, ni industrias,... es paupérrimo.
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